domingo, 6 de diciembre de 2015

Aplicación de técnicas de soporte vital básico.



El oxígeno y el cerebro. 

Recuerda que el aire llega a los pulmones a través de las vías respiratorias, de aquí pasa a la sangre por medio del intercambio de gases que se produce en los alvéolos y, una vez en la sangre, llega al cerebro y a todos los órganos de tu cuerpo, gracias a la fuerza impulsora del corazón.

Las células del cerebro son muy sensibles a la falta de oxígeno, tanto es así que a los pocos segundos de dejar de recibir oxígeno, éste deja de funcionar. Si la falta de sangre oxígenada se prolonga en el tiempo (unos 3 ó 4 minutos), las células cerebrales empiezan a morir. El problema reside en que las células cerebrales no son sustituidas por otras nuevas (no se regeneran), como ocurre con otros órganos.

Otros órganos pueden estar mucho tiempo sin recibir sangre oxigenada y luego siguen funcionando. Gracias a esto son posibles los transplantes, ¿lo habías pensado antes? Cuando se realiza un transplante, por ejemplo de corazón, el órgano donado, en numerosas ocasiones está a muchos kilómetros del paciente receptor. Este órgano pasa cuatro o cinco horas metido en una nevera antes de ser colocado en el receptor… Y después sigue funcionando con normalidad, ¿no te parece increíble?

Esto no sucede con el cerebro: si está mucho tiempo sin recibir la cantidad suficiente de sangre con oxígeno, los daños pueden ser irremediables.

El ser humano, está expuesto a diario a padecer enfermedades, pequeños accidentes, la mayoría son de carácter leve y no necesitan asistencia médica especializada.

En otras ocasiones estas enfermedades, accidentes, etc., pueden poner en peligro la vida de la persona que las padece. Un ejemplo de esto pueden ser los ataques cardíacos, accidentes de tráfico, ahogamientos, atragantamientos, etc. En definitiva son situaciones de riesgo potencial para la vida si no se actúa con rapidez y serenidad.

La mejor forma de evitar estas situaciones es mediante la prevención: Evitar malos hábitos de vida como consumo de alcohol, drogas, tabaco. Conducir con precaución, cumpliendo las normas de circulación, evitar dejar productos peligrosos al alcance de los niños y niñas, etc.


Por desgracia, en otras ocasiones la prevención no es suficiente y se producen situaciones que pueden desencadenar en un paro cardíaco.


¿Sabes qué es un paro cardiorrespiratorio?



La parada cardiorrespiratoria (PCR), se define como el cese brusco, inesperado y potencialmente reversible, de la respiración y de la circulación espontánea. La PCR, también se conoce como muerte súbita.

Recuerda que el cese de actividad de la respiración y la circulación, pueden ser reversibles si actúas con rapidez y con unos conocimientos básicos en soporte vital. Estos conocimientos los vas a adquirir en este capítulo.

La consecuencia de la PCR, es la falta de oxígeno a los órganos vitales y en especial al cerebro.

El paciente que sufre un paro cardiorrespiratorio, tiene parado su corazón y su función respiratoria… ¡es como si estuviera muerto!, y lo estará si no eres capaz de sustituir su respiración y circulación en pocos minutos.

A cada minuto que pasa disminuyen las probabilidades de sobrevivir y aumenta el riesgo de muerte. Tan es así que si no inicias las maniobras de resucitación antes de cinco minutos, la parada cardiorrespiratoria suele ser irrecuperable.

Recuerda esto: Por cada minuto que pasa disminuye un 10% la probabilidad de sobrevivir de tu paciente. O lo que es lo mismo, en 10 minutos de parada el desenlace puede ser fatal.

Importante: No debes confundir la parada cardiorrespiratoria potencialmente recuperable, con la muerte producida como consecuencia del envejecimiento biológico o de la evolución terminal de una enfermedad.

¿Conoces los signos de parada cardiorrespiratoria?

La ausencia de respiración y circulación se manifiesta en el paciente con:
  • Pérdida brusca de consciencia. El paciente está Inconsciente. 
  • Ausencia de respiración. El paciente No Respira.
  • Ausencia de pulso central. El paciente No tiene Pulso. 
  • Ausencia de signos de vida. Su estado es como si estuviera muerto, pero… tú puedes evitar que esto suceda.

¿De qué forma puede iniciarse un paro cardiorrespiratorio?



La PCR se puede iniciar por dos motivos:
  • Por paro respiratorio, o por
  • Paro cardíaco.

Paro respiratorio:
 
Se produce cuando el paciente no respira, pero hay latidos cardíacos. Estos latidos durarán un corto período de tiempo (4-5 minutos), lo que te permitirá, con una actuación rápida y eficaz, evitar la parada cardíaca.

La parada respiratoria y en concreto la asfixia es la causa más frecuente de PCR en niños. Suele estar provocada por algún objeto que introducen en su vía respiratoria y no les deja respirar, por ahogamiento, por ingesta accidental de fármacos que deprimen el centro de la respiración, traumatismos en el tórax, etc.

Paro cardíaco:

Es la ausencia de latido del corazón. La falta de sangre oxigenada provoca un rápido deterioro de dos órganos vitales: cerebro y centro respiratorio. Por lo tanto la parada cardíaca va seguida inmediatamente del paro respiratorio.

La parada cardíaca es la causa más frecuente de PCR en personas adultas. Los infartos de miocardio son los responsables de 80% de los paros cardíacos producidos fuera de los hospitales. En los países industrializados es la primera causa de muerte en personas adultas.

En España se produce un infarto de miocardio cada 8 minutos, y más de la mitad de las personas afectadas mueren; Casi el 60 % de estas muertes se producen fuera del hospital. La mayoría de ellas se podrían evitar, alertando de forma inmediata a los números de emergencias y aplicando maniobras de Soporte Vital Básico.

¿Recuerdas los síntomas del Infarto de miocardio?
  • El síntoma más común es el de opresión en el centro del pecho. Esta presión, dolor, sensación de quemazón… se puede extender a la espalda, el cuello, la mandíbula, los hombros y brazos.
  • Se puede acompañar de:
    • sudoración,
    • náuseas,
    • vómitos,
    • ahogo o
    • mareo.



¿Cómo ayudo al paciente a salir de la PCR?

Imagina que estás sentado tomando un café y encuentras a una persona que se desvanece. ¿Cómo lo puedes ayudar?

Puedes ayudar a tu paciente aplicando maniobras de Resucitación Cardiopulmonar (RCP). Éstas se incluyen dentro de un conjunto de actuaciones encaminadas a revertir el estado de parada cardiorrespiratoria. Es decir, su objetivo es restablecer la circulación y respiración del paciente.

Para conseguirlo primero sustituyes la respiración y la circulación sanguínea de tu paciente, mediante la respiración boca a boca y el masaje cardíaco externo, para después intentar restaurar la respiración y la circulación espontáneas, con el objetivo fundamental de recuperar las funciones cerebrales completas.

Estas acciones y maniobras están incluidas en la llamada Cadena de Supervivencia, que es una sucesión de actuaciones que hacen más probable que una persona sobreviva a una situación de emergencia.


La Cadena de Supervivencia está formada por cuatro eslabones:
  1. Llamada al teléfono de emergencias. 
  2. Resucitación Cardiopulmonar Básica (RCP básica). 
  3. Desfibrilación precoz. La estudiarás en próximos capítulos.
  4. Resucitación Cardiopulmonar Avanzada (RCP avanzada).
Al igual que los eslabones de una cadena, cada una de estas acciones ocupa un lugar determinado en la secuencia de actuación ante una situación de parada cardiorrespirtoria, debes seguirla de forma ordenada sin saltarte ningún “eslabón”.

No tendría sentido iniciar maniobras de RCP básica (2º eslabón de la cadena), si se te olvida llamar al sistema de emergencias (1er eslabón de la cadena) para que vengan a ayudarte. ¿Lo entiendes? Si no pides ayuda, difícilmente te podrán ayudar.

Tú puedes formar parte de todos los eslabones de la cadena:
  • Si estás en tu día de descanso y te encuentras con una persona que ha sufrido un desvanecimiento, puedes cubrir los dos eslabones primeros de la cadena: Reconoces la situación de urgencia vital, llamas al teléfono de emergencias y después, puedes aplicar maniobras de RCP básica.
  • Si estás en tu ambulancia y ésta dispone de un desfibrilador, podrás llegar hasta el tercer eslabón de la cadena.
En este capítulo no te hablo de la desfibrilación porque hay un capítulo dedicado a ello. En este capítulo quiero que aprendas solamente a hacer las maniobras de RCP básica.
  • Si formas parte de un equipo de emergencias, puedes actuar hasta el cuarto nivel de la cadena. Llegarás a colaborar en las maniobras de RCP avanzada.

Llamada al Sistema de Emergencias.

Lo primero que debes hacer cuando te encuentras con una persona que ha sufrido un paro cardiorrespiratorio, es pedir ayuda.

¿Cómo solicitas la ayuda?

  •  Si estás solo o sola, debes llamar inmediatamente al teléfono de emergencias.
  •  Si hay alguna persona cerca de ti, que te pueda ayudar, pídele que llame a los servicios de emergencias. En este caso debes empezar cuanto antes las técnicas de resucitación.
Debes mantener las técnicas de resucitación hasta que lleguen los equipos médicos especializados o hasta que la víctima recupere signos claros de vida, es decir, que empiece a moverse o a respirar sin tu ayuda. También debes procurar realizar las técnicas de resucitación sin interrupciones, entenderás la importancia de esto más adelante.

¿A qué número debes llamar?

Existe una recomendación de la Unión Europea para que en todos los estados miembros haya un único teléfono para cualquier tipo de emergencia. Este número es el 112.

Cuando llamas al 112 para pedir ayuda, la llamada es “filtrada” por un centro coordinador, que se encargará de enviarte el recurso necesario dependiendo de la naturaleza de la ayuda que solicitas. Si necesitas ayuda sanitaria alertarán a los servicios médicos, si se trata de un incendio a los bomberos, también pueden alertar a la policía, guardia Civil, etc. En definitiva enviarán a la persona adecuada para ayudarte.

Ahora ya sabes que si necesitas ayuda urgente en cualquier lugar la Unión Europea, debes marcar el número 112. No te preocupes por el idioma porque en los centros de coordinación del 112, tienen intérpretes que te atenderán en tu idioma.

En algunas comunidades autónomas, como por ejemplo Andalucía, aparte del teléfono de emergencias 112, existe un teléfono exclusivo para emergencias sanitarias, este es el 061. Así que si necesitas ayuda sanitaria puedes llamar al 112 o al 061 indistintamente.

¿Qué información debes dar cuando llames al 112 o al 061?
  • Identifícate e informa del lugar desde donde llamas. Es importante que des un número de teléfono de contacto por si te tienen que volver a llamar.
  • Explica de forma clara el motivo de la llamada: dolor en el pecho, ahogo, pérdida de conocimiento, accidente, etc.
  • Indica el lugar exacto donde se encuentra la persona que necesita ayuda.
  • En caso de accidente indica si es un atropello, choque, etc., número de personas que necesitan ayuda y posibles riesgos.
  • En el caso de que llames porque tu paciente esté inconsciente, informa si respira, si tiene pulso central y cuanto tiempo lleva en ese estado.
  • Contesta a las preguntas que te haga el operador de forma breve y con calma.
  • Cuelga siempre en último lugar. De esta forma te aseguras de que ya no quieren preguntar nada más.
En alguna ocasión puedes tener la sensación de que te están haciendo muchas preguntas, y tú lo que deseas es que vengan de inmediato. Ten paciencia, el tiempo que estás al teléfono no va a retrasar el envío de la ayuda que necesitas. En los centro de coordinación hay varias personas encargadas de recibir las llamadas y, mientras una está hablando contigo, otra se encargará de enviarte a los servicios médicos (en el caso de que necesites asistencia sanitaria). Algunas veces la ayuda llega antes de que cuelgues el teléfono.



RCP básica.

La aplicación de técnicas de Resucitación Cardiopulmonar básica (RCP básica), es el segundo eslabón de la cadena se supervivencia.
 
Antes de continuar debes saber que en función del material disponible y de los conocimientos y habilidades necesarias, hay tres tipos de Resucitación Cardiopulmonar (RCP):
  • Resucitación Cardiopulmonar básica (RCP básica): Son las maniobras sencillas que se realizan sin ningún tipo de material excepto el necesario para prevenir contagios al aplicar la técnica del boca a boca. Las técnicas RCP básica las pueden aplicar cualquier persona, con un entrenamiento básico. Lo ideal sería empezar la RCP básica antes de 4 minutos desde el inicio de la parada cardiorrespiratoria. Transcurrido este tiempo los daños cerebrales pueden ser irreversibles. Por eso es tan importante que conozcan las técnicas de RCP básica el mayor número de personas posibles.
  • Resucitación Cardiopulmonar instrumentalizada (RCP instrumentalizada): Este tipo de resucitación es el que realizarás cuando vayas en tu ambulancia. Aplicarás maniobras de RCP básica, pero usarás material básico que te ayudará a liberar las vías aéreas de tu paciente (aspirador de secreciones, cánulas de guedel) y a sustituir su respiración sin necesidad de hacer el boca a boca (balón de resucitación).
  • Resucitación Cardiopulmonar avanzada (RCP avanzada): Son las técnicas que se aplican por un equipo de profesionales sanitarios cualificados, entrenados y equipados con el material necesario para revertir el estado de parada cardiorrespiratoria. Además aplicarán cuidados avanzados sobre las vías respiratorias y la circulación del paciente. La RCP avanzada debe iniciarse antes de transcurridos 8 minutos del PCR.

RCP básica: Resumen.

En resumen:

RCP básica:
  • Técnicas sencillas. 
  • Aplicadas por cualquier persona.
  • Requieren un entrenamiento básico.
  • Sin material.

RCP avanzada:
  • Técnicas complejas. 
  • Aplicadas por personal sanitario cualificado.
  • Requieren entrenamiento en RCP.
  • Se realizan con material específico de apoyo respiratorio y circulatorio avanzado.

RCP instrumentalizada:
  • Es un paso intermedio entre la RCP básica y avanzada. 
  • Requieren entrenamiento en RCP básica y conocimiento del material empleado.
Lo ideal sería que, tras detectar la situación de PCR, pasen menos de 4 minutos para el inicio de la RCP básica y menos de 8 para empezar con la RCP avanzada.

En la RCP básica incluyen los dos primeros eslabones de la cadena de supervivencia (detección de la situación con petición de ayuda e inicio del tratamiento básico) y, para tal fin se emplean técnicas elementales de evaluación de la gravedad, inmovilización, movilización y soporte ventilatorio y soporte circulatorio.

La RCP básica se realiza sin equipamiento alguno, aceptándose como único material accesorios para evitar el contacto directo boca-boca entre el reanimador y la víctima (llamados dispositivos de barrera).

¿Cuál es al objetivo de la RCP básica?

La RCP básica tiene como objetivo la oxigenación de emergencia:
  • mediante el mantenimiento de una vía aérea permeable y de una ventilación y circulación eficaces, realizando esto sin más equipo que los dispositivos de barrera.

Secuencia de actuación de RCP básica.

Para poder ayudar a tu paciente de forma adecuada, tienes que seguir una secuencia de actuación de forma sistemática. Los pasos de la RCP básica incluyen una serie de valoraciones y acciones, que realizadas de forma ordenada, te ayudarán a salvar la vida de tu paciente. Siguen un orden lógico e intuitivo, para que te sea más fácil de recordar.

Recuerda que estas técnicas son muy fáciles de aprender y que, gracias a ellas, puedes salvar una vida.

En capítulos anteriores te he hablado de la regla Mnemotécnica ABC, para el soporte vital básico, pues bien, ahora es el momento de aprenderla y ponerla en práctica.

Es muy fácil de recordar, memorízala y más adelante te doy los detalles.

Si te encuentra a una persona que necesita ayuda:


1. Comprueba su nivel de consciencia.
2. Si está inconsciente pide ayuda.

A continuación aplica el ABC….


3. A; Abre la vía aérea con la maniobra frente–mentón.
4. B; Comprueba la respiración y si no respira haz el boca a boca.  
5. C; Comprueba el pulso del paciente (circulación) y si no tiene, haz compresiones en el tórax.

¿Sabes de donde vienen las siglas ABC?
  • A, se emplea para recordar vía aérea, que en inglés se dice Airway
  • B, se emplea para recordar la respiración, que en inglés se dice Breathing
  • C, se emplea para recordar la circulación, que en inglés se dice Circulation.



La RCP básica paso a paso.

Ahora te vamos a explicar con más detalle esta secuencia de actuación; Si te encuentras a una persona que parece inconsciente, debes actuar de la siguiente forma:
  1. Comprueba que no hay peligro. Comprueba consciencia.
  2. Pide ayuda.
  3. Libera la vía aérea.
  4. Comprueba respiración.
  5. Inicia la ventilación.
  6. Comprueba circulación.
  7. Compresiones torácicas.
  8. Combina compresiones y ventilación.

1. Asegurar y comprobar consciencia. 

Analiza la situación y comprueba que tanto la víctima como tú estáis en un lugar seguro. Si ha sufrido un accidente de tráfico, una electrocución, etc., lo primero que has de hacer es velar por tu seguridad y por la de la persona a la que vas a socorrer. No te dejes llevar por el ímpetu de ayudar y valora de forma racional la situación. 
Comprueba el nivel de consciencia del paciente: Primero lo debes llamar en voz alta y preguntar: ¿se encuentra bien? o ¿cómo está? Si no responde o no se mueve o no abre los ojos, sacúdele por los hombros con insistencia. Si ha sufrido un accidente no hay que zarandearlo, puede que tenga dañada su columna vertebral. En este caso dale unas palmadas en el hombro y evita movimientos bruscos. 
Sí responde contestando o moviéndose: 
  •  Déjela en la posición en la que está (siempre que no suponga un peligro), comprueba su estado (si está herida, si le duele en alguna parte…). 
  • Envía a alguien en busca de ayuda y, si estás solo o sola, deja a la víctima y vete a buscar ayuda.
  • Vuelve a acompañar a tu paciente y comprueba con frecuencia su estado de salud.

2. Pide ayuda.

Si NO responde: ¡Pide ayuda!, ¡es el momento de activar el sistema de emergencias!

En el caso de que tu paciente no responda a los estímulos (gritos y golpecitos en el hombro), debes considerar que está inconsciente.

Grita pidiendo ayuda, por si hay alguien a tu alrededor que te pueda socorrer. Si estás solo o sola, deja a la víctima y llama al teléfono de emergencias (061 – 112), excepto si es un niño o un adulto con signos evidentes de asfixia. En este caso aplica 2 minutos de RCP y luego pide la ayuda.

Si tu paciente está sentado o boca abajo, colócalo con cuidado boca arriba y sobre una superficie dura. Esta es la posición de RCP. No sirve la cama porque es una superficie blanda.

 3. Libera la Vía Aérea.
 
Si el paciente está inconsciente, la permeabilidad de sus vías respiratorias corre peligro. La causa más frecuente que impide el paso del aire hacia los pulmones en el paciente inconsciente, es por su propia lengua. Cuando el paciente yace boca arriba, la lengua cae hacia atrás impidiendo el paso de aire.

Mira con atención la ilustración:


  • En la figura de la izquierda, la lengua está relajada y cae hacia atrás, obstruyendo la vía aérea. 
  • Si tiras de la cabeza hacia atrás, como aparece en el dibujo de la derecha, mira como la lengua sube y deja paso al aire.

¿Cómo lo haces en tu paciente?
  • Pon una mano en su frente, la otra en la barbilla y tira de la cabeza hacia atrás. Esta maniobra se conoce como la “maniobra frente-mentón”. Con ella consigues que la lengua deje pasar el aire por la boca y la nariz.
  • Mira su boca asegúrate que no haya nada que impida el paso del aire.

¡Importante! Si tu paciente ha sufrido un accidente o sospechas que pueda tener una lesión, procura no extender su cabeza para liberar su vía aérea. En este caso tracciona de su mandíbula hacia arriba sin extender su cabeza para intentar dejar que pase el aire. Esta técnica es compleja y, en ocasiones, poco efectiva. Si no eres capaz de liberar la vía aérea con esta técnica, y ante el riesgo vital de tu paciente, usa la frente - mentón.


4. Comprueba su respiración.

Ya está libre la vía aérea. Ahora debes comprobar si respira. (Paso “B” del ABC).

¿Cómo sé si un paciente inconsciente respira?
  • Haz la maniobra frente-mentón: Pon una mano en la frente de tú paciente, la otra en su barbilla y tira de la cabeza hacia atrás. Acerca tu mejilla a su boca.
  • Mira el pecho del paciente y, VE si se eleva su pecho, OYE si emite algún sonido su boca y SIENTE el vaho calentito de su respiración.
Recuerda esta regla Mnemotécnica para valorar la respiración: VER, OIR, SENTIR.

No pierdas más de 10 segundos en comprobar la respiración. Si pasado este tiempo tienes dudas, considera que tu paciente no respira.

Si hace respiraciones leves que no elevan el pecho o respira de forma esporádica, lo considerarás como si no respirase.

Si respira normalmente:
  • Colócalo tumbado de lado. De esta forma si vomita, no se obstruirá su vía respiratoria. A esta forma de colocar al paciente de lado se le llama Posición Lateral de Seguridad (PLS).
  • Comprueba de forma regular que mantiene la respiración.

Posición Lateral de Seguridad (PLS).

En esta posición debes poner al paciente cuando se encuentra inconsciente pero comprobamos que respira y tiene pulso. Con ella prevenimos que se produzca aspiración de un posible vómito ó que se obstruya la vía aérea con la base de la lengua.
  • Te permite mantener al paciente en una posición estable, mientras te apartas de él para pedir ayuda. 
  • Esta maniobra está contraindicada ante la sospecha de trauma con afectación cervical.
  • Hay que tener cuidado de vigilar la circulación periférica de la parte inferior del brazo, y asegurarse de que se reduce al mínimo el tiempo en el que hay presión sobre este brazo. Si hay que mantener a la víctima durante más de 30 minutos en la posición lateral de seguridad, se le debe dar la vuelta para que repose del otro lado.
  • Si el paciente tiene gafas, se las debes quitar para evitar que se las clave.
¿Cómo colocas al paciente en PLS?
  • Arrodíllate al lado de la víctima y asegúrate de que ambas piernas están rectas. 
  • Coloca el brazo más cercano a ti haciendo ángulo recto con su cuerpo, con el codo doblado y la palma de la mano en el punto más alto.
  • Cruza el otro brazo sobre su pecho y mantén el revés de la mano contra la mejilla de la víctima más próxima a ti.
  • Con la otra mano sujeta la pierna más alejada de ti justamente por encima de la rodilla y levántala manteniendo el pie en el suelo.
  • Manteniendo la mano de la víctima presionada contra su mejilla, tira de la pierna más lejana para hacerla girar hacia ti, poniéndola de lado.
  • Coloca la pierna de encima, de forma que tanto la cadera como la rodilla estén flexionadas en ángulo recto.
  • Inclina hacia atrás la cabeza para asegurarte de que la vía aérea permanece abierta.
  • Coloca la mano bajo la mejilla, si fuera necesario, para mantener la cabeza extendida.
  • Comprueba la respiración con regularidad.


Recuerda: Que aprender a colocar a la víctima inconsciente que respira en la posición lateral de seguridad puede salvarle la vida.

5. Inicia la ventilación.

¿Qué debes hacer si tu paciente no respira con normalidad?


Si NO respira con normalidad:
  • Tú debes respirar por él. Empieza a hacer la respiración boca a boca. 
  • Administra dos respiraciones, cada una de un segundo, con la cantidad de aire suficiente para lograr que el pecho se eleve. Haz las ventilaciones de forma lenta; si las haces con rapidez, gran parte del aire que le das en cada respiración, se irá a su estómago, este se empezará a llenar…y saldrá su contenido en forma de vómito.
¿Cómo se hace la respiración boca a boca?
  • La cabeza de tu paciente está extendida hacia atrás, mediante la maniobra frente - mentón. 
  • Sella tu boca con la boca de tu paciente. Aprieta la parte blanda de la nariz de la víctima con los dedos índice y pulgar de la mano que tienes puesta sobre su frente.
  • Exhala aire durante un segundo y mira como se eleva su pecho.
  • Retírate para que salga el aire que has introducido en sus pulmones, haz una inspiración normal y vuelve a administrar otra respiración.
Si tienes un pañuelo, gasa o algún dispositivo diseñado para tal fin, lo puedes colocar entre tu boca y la del paciente.

Lo más complicado de esta técnica es el sellado de la boca. Lo puedes practicar de la siguiente forma:
  • Cierra el puño de tu mano (cualquiera de las dos) y por la parte del dorso (la parte contraria a la que quedan los dedos), abre tu boca y trata de “sellarla” con tu mano. Ábrela todo lo que puedas, de esta forma conseguirás un sellado perfecto. ¡Practícalo!

Importante: Si al aplicar la primera ventilación notas que el aire no entra bien, intenta hacer de nuevo la maniobra frente-mentón. Si le aplicas la segunda ventilación y sigue sin pasar bien el aire, no lo intentes de nuevo (no te empeñes en hacerlo "perfecto", vas a perder un tiempo precioso), pasa al paso siguiente de la secuencia de RCP básica...

Recuerda: Sólo 2 ventilaciones, pase o no pase el aire.

Recuerda que cuando vayas en tu ambulancia no vas a hacer el boca a boca. En ella llevas dispositivos diseñados para administrar ventilaciones.

6. Comprueba la Circulación.

Tu paciente está inconsciente, NO Respira, le has administrado dos ventilaciones. Ahora es el momento de comprobar si funciona su corazón, esto lo haces comprobando el pulso carotídeo. Este es el paso “C” de la secuencia de RCP básica.

¿Dónde palpo el pulso carotídeo?
  • Las arterias carótidas pasan por ambos lados del cuello. 
  • Para localizarlas, toma como referencia la “nuez de Adán”. Coloca encima de ella tus dedos índice y medio.
  • Deslízalos hacia la parte externa del cuello y siente el latido.
Importante: No debes emplear más de 10 segundos en comprobar el pulso. Si tras este tiempo no lo notas de forma clara, es como si no lo tuviera.

El paciente SÍ tiene pulso. Es decir, estás ante un paciente inconsciente que No respira, pero que SÍ tiene pulso.

En este caso la vida del paciente depende claramente de ti. El que siga funcionando su corazón depende de las respiraciones que le vas a dar.
  • Debes suplir su respiración administrando de 10 a 12 respiraciones por minuto. Esto es, aproximadamente, una respiración cada 5 o 6 segundos. 
  • Cada respiración debe durar 1 segundo y hacer que el pecho se eleve.
  • Debes volver a comprobar el pulso carotídeo cada 2 minutos. Recuerda; no emplees en esto más de 10 segundos.
  • Si tu paciente empieza a respirar normalmente pero sigue inconsciente, colócale en la posición lateral de seguridad (PLS). Permanece atento para volverle boca arriba y volver a comenzar la respiración boca a boca si dejase de respirar. 
  • Comprueba sus signos vitales cada 2 minutos.
  
 7. Haz compresiones torácicas combinadas con ventilación.

Ante un paciente inconsciente que No respira y No tiene pulso carotídeo. Debes iniciar las compresiones torácicas para sustituir su circulación.


 8. Combina compresiones y ventilación.

 Tu paciente está en parada cardiocirculatoria: debes suplir su respiración y la función de su corazón.

¿Cómo hago las compresiones torácicas?

Las compresiones torácicas también se llaman masaje cardíaco.

El punto de masaje se localiza en el centro del pecho, justo en la mitad inferior del hueso que se encuentra en el centro (el esternón). Este punto coincide con la altura de la maminas (“las tetillas”) en el hombre.


Sobre este punto localiza el talón de una mano y, sobre ésta, el talón de la otra. El talón de la mano es la zona de la palma de la mano que se une con la muñeca.

Los dedos de ambas manos se deben entrelazar.


Los brazos se colocan rectos, en la vertical del tórax, para así dejar caer el peso de nuestro cuerpo.

Debes deprimir el tórax de tu paciente unos 4 ó 5 centímetros, después debes dejar que se descomprima.

Debes hacerlas de forma rápida, hasta conseguir un ritmo de 100 por minuto.


 ¡Repite esto 30 veces y después aplica 2 ventilaciones!

Combina el masaje con la ventilación: 30 masajes por cada 2 ventilaciones. (30/2)

De esta forma consigues dar en un minuto unas 100 compresiones torácicas y ventilar 8 o 10 veces.

¿Hasta cuándo hago 30 compresiones, 2 ventilaciones?

¡Hasta la llegada de la ayuda especializada o hasta la recuperación de la víctima!
  • Detente sólo para volver a comprobar signos de que hay circulación, si la víctima hace un movimiento o respira espontáneamente; en caso contrario no debes interrumpir la resucitación.
  • Si tienes otro compañero o compañera que te ayude: mientras una persona da masaje, que es lo más cansado, la otra persona ventila. Os podéis cambiar cada 1 ó 2 minutos.
  • Si tienes dificultad para administrar las ventilaciones o el paciente ha vomitado, y no te atreves a hacerle el boca a boca, al menos haz el masaje de forma correcta.
¡Ya sabes cómo debes actuar ante un paciente inconsciente, que no respira y que no tiene pulso! Seguro que lo vas a hacer de maravilla.

Todo lo que te he explicado con anterioridad se puede resumir de la siguiente forma:

Ante un paciente inconsciente, que no respira y que no tiene pulso, solicita ayuda lo antes posible, inicia el masaje cardíaco de forma inmediata y no lo interrumpas. Si te es posible altérnalo con ventilaciones a una relación de 30/2; por cada 30 compresiones, 2 ventilaciones.

Recuerda: ¡Pide ayuda e inicia al masaje cardíaco antes de 4 minutos!


Desobstrucción de la Vía Aérea.
¿Cómo diagnostico una obstrucción de la vía aérea?

El reconocimiento de la obstrucción dela vía aérea es la clave del éxito, es importante no confundir esta emergencia con un desmayo, ataque al corazón, etc. 
  • Puede haberse visto a la víctima comiendo, o si es un niño puede haberse llevado algún objeto a la boca. 
  • Una víctima que se está ahogando se lleva a menudo la mano a la garganta. En este caso es importante preguntar a la víctima ¿te estás atragantando? 
  • Con obstrucción parcial de la vía aérea la víctima estará inquieta y toserá. 
  • Puede haber inspiración ruidosa, un silbido cuando la víctima intenta tomar aire.
 
Secuencia de actuación ante una Obstrucción de la vía aérea (atragantamiento) 
  • Si la víctima muestra signos de obstrucción leve de la vía aérea; puede hablar, toser, respirar: Dile que tosa, pero que no haga nada más. La tos es el mecanismo más efectivo para desobstruir la vía aérea.
  • Si la víctima muestra signos de obstrucción grave de la vía aérea; no puede hablar, la respiración es ruidosa o no puede respirar, pero está consciente: ¡Dale 5 golpes en la espalda!, siguiendo estos pasos:
  1. Colócate a un lado y ligeramente por detrás de la víctima. 
  2. Ponle una mano en el pecho e inclínalo hacia adelante, de manera que, en el caso de que se consiga movilizar el objeto que obstruye la vía aérea, lo expulse por la boca y no progrese más en la vía aérea.
  3. Dale 5 golpes entre las paletillas de forma brusca con el talón de la otra mano. 
  4. Comprueba si cada golpe en la espalda ha aliviado la obstrucción de la vía aérea. El objetivo es aliviar la obstrucción con cada golpe, y no necesariamente dar los cinco.
  • Si, tras dar los 5 golpes en la espalda, no se ha conseguido aliviar la obstrucción de la vía aérea, da hasta 5 compresiones abdominales, sigue estos pasos:
  1. Colócate tras la víctima y rodéala con los brazos por la parte alta del abdomen (entre el ombligo y la “boca del estómago”). 
  2. Inclínala hacia delante.
  3.  Cierra el puño y colócalo entre el ombligo y la “boca del estómago”, justo donde acaban las costillas. 
  4. Agarra el puño con tu otra mano y tira con fuerza hacia dentro y hacia arriba. 
  5. Repítelo hasta 5 veces.

Esta técnica es conocida como “maniobra de Heimlich”.
En caso de pacientes obesos o mujeres embarazadas en estado avanzado de gestación, en lugar de rodearlos por el abdomen, abrázalos por el pecho, en el mismo sitio donde das el masaje cardíaco.
  • ¡Si la obstrucción persiste, alterna 5 golpes en la espalda con 5 compresiones abdominales!
  •  Si la víctima se queda inconsciente en algún momento:
  1. Túmbalo con cuidado en el suelo.
  2.  Activa inmediatamente a los equipos de emergencias (061 ó 112). 
  3. Comienza con la RCP. Inicia el masaje cardíaco y la ventilación a una relación 30/2. De igual forma que lo has aprendido en la RCP básica.
Lo único que debes hacer de forma distinta es que antes de dar las dos ventilaciones, debes mirar en el interior de su boca por si ves el objeto con el que se ha atragantado. En el cado de que lo veas, mete tu dedo en forma de gancho por un lateral de su boca y “barre” todo el contenido de esta hacia el exterior.
 


RCP básica Pediátrica.

La prevención tiene un papel muy importante para evitar muertes en niños y niñas.

Recuerda que en la persona adulta el primer eslabón de la cadena se supervivencia era “llamada al sistema”. Era muy importante alertar cuanto antes a la ayuda especializada para intentar revertir la parada cardíaca.
En la cadena de supervivencia pediátrica, la llamada al sistema es importante, pero se sitúa en tercer lugar, porque antes de hacerlo hay que iniciar la RCP básica (Masaje – ventilación). El objetivo es ventilar al niño antes de llamar.

Reflexiona
Recuerda que te hemos dicho que la mayoría de paradas cardiorrespiratorias (PCR) en los niños, son de origen respiratorio. Si encuentras a un niño inconsciente, antes de dejarlo solo para pedir ayuda, debes aplicarle durante 2 minutos RCP básica (5 ciclos de masaje-ventilación). Puede que con estas maniobras reviertas su estado.

Definiciones de edad.
  • En pediatría se llama lactante al niño o niña desde que nace hasta que cumple 1 año.
  • Edad infantil o niño es desde el año hasta la pubertad.
¿Cuál es la secuencia de actuación en el la PCR infantil?

La secuencia es igual que en la persona adulta, con dos diferencias. En un niño que no respira y que no tiene pulso:
  • Cuando sólo se dispone de un reanimador, antes de llamar al 061 ó 112, se realizará RCP durante dos minutos.
  • Si hay 2 reanimadores la relación masaje-ventilación es 15/2. Si estás tu solo es 30/2.
Como ver todas las acciones van encaminadas a potenciar las ventilaciones.




Secuencia de actuación de RCP básica Pediátrica.

¿Sabes cómo actuar ante un niño que se desvanece en tu presencia?

Apréndete esta secuencia:

1. Asegura la seguridad tanto del niño como la tuya. 

2. Comprueba el nivel de consciencia del niño.
  • Estimúlalo suavemente “¿estás bien?” 
  • No lo sacudas cuando haya sospecha de lesión cervical.
A los niños pequeños se les estimula dándole palmaditas en el talón del pie.
 
Sí responde contestando o moviéndose:
  • Colócalo en una postura cómoda. 
  • Pide ayuda, si es necesario.
  • Reevalúa.

No Responde:

3. Grita para pedir ayuda. Si estás tu solo, no abandones al niño. 

4. Abre la vía aérea: Maniobra frente-mentón. En el lactante mantén la cabeza en posición neutra. 
  
5. Comprueba la respiración: Manteniendo la vía aérea abierta, ver, oír y sentir. No más de 10 segundos.

Sí respira:
  • Colócalo en PLS
  • Reevalúa cada 2 minutos.

No respira o son inefectivas:
  • Da 2 ventilaciones que eleven el pecho. 
  • Si no se eleva, recoloca la cabeza y vuelve a intentarlo.
  • En el lactante puedes abarcar con tu boca su boca y su nariz.

6. Comprueba la circulación del niño. No emplees más de 10 segundos.
  • Si el niño es mayor de un año, palpa el pulso carotídeo como en las personas adultas. 
  • En el lactante, palpar el pulso braquial en la parte interna del brazo.
¿Cómo localizarlo?
  • Dobla tu brazo como si quisieras sacar músculo. 
  • Pon los dedos índice y medio de la otra mano, debajo de tu músculo, hacia la mitad del brazo. ¿Notas el latido? Pues hazlo igual con los bebés.
El pulso debe ser de más de 60 latidos por minuto, si no lo tratarás como si no tuviera.

Recuerda: La frecuencia cardiaca normal de un lactante es de unos 150 latidos por minuto, de un niño de unos 120. Con menos de 60 latidos por minuto, no se satisfacen las necesidades de sangre oxígenada de su cerebro.

Sí hay pulso, a más de 60 latidos por minuto.
  • Ventila una vez cada 3 segundos.
  • Comprueba pulso cada 2 minutos.
No hay pulso o es de menos de 60 por minuto: Iniciar las compresiones torácicas.

Combinar las compresiones con las respiraciones:
  • Si estás solo: 30 / 2 
  • Con ayuda: 15 / 2
  • Para realizar las compresiones en el lactante, comprime el esternón con la punta de dos dedos.
  • Para realizar las compresiones en los niños mayores de un año, se colocará el talón de una sola mano en el mismo lugar que en el adulto.
  7. Realiza 2 minutos de RCP y pide ayuda si no lo has hecho antes.


Desobstrucción de la vía aérea en niños.

La desobstrucción de la vía aérea en el niño mayor de un año es igual que en el adulto. En el lactante hay algunas diferencias que vamos a comentar:
  • Si el niño tose con efectividad, no se precisa ninguna maniobra externa. Solamente se debe animar al niño a toser y vigilarle continuamente. 
  • Si la tos del niño deja de ser efectiva, pide ayuda inmediatamente

Si el lactante está consciente, pero no tose o la tos es inefectiva:
  • Da 5 compresiones en el pecho, en el mismo lugar que el masaje cardiaco. Coloca al niño sobre tu regazo, con la cabeza más baja que las nalgas.
Con el niño o el lactante inconsciente
  • Inician las maniobras de RCP (masaje ventilación) como lo harías en el niño inconsciente. 
  • Recuerda debes mirar en el interior de la boca del niño antes de aplicarle las respiraciones.  

Importante: Los niños no deben tener acceso a ningún objeto que quepa, por el cilindro de cartón de los rollos de papel higiénico. Si cabe por éste, hay peligro de que le pueda obstruir sus vías respiratorias.



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